::SALIDA A RIAÑO-2::

POR EL GRUPO DE MONTAÑA PEGASO

(Texto: Paco Toledo)

26,27,28 Y 29 de Diciembre de 2005

 

La ya clásica salida de Navidad del Grupo Montaña Pegaso nos llevó a finales del año 2005 a las montañas de Riaño, que por su cercanía a los Picos de Europa hacen que sean bastante desconocidas, ya que casi todos los montañeros nos vemos atraídos por estos impresionantes Picos y desechamos unos días en este bello rincón leonés. Y no tiene porque ser así, ya que, Riaño cuenta con atractivos que merecen la pena más de una visita.

Unos cuantos de nuestro Grupo estuvimos hace unos años aquí y nos gusto bastante y por eso decidimos volver este año. El invierno en Riaño, aunque duro, es precioso y espectacular, el pueblo cuenta con un precioso embalse que se hizo tristemente famoso cuando fue construido ya que llevó a la destrucción del antiguo Riaño, así como algunos pueblos más. El embalse está rodeado por el suroeste por una cadena de montañas, que se reflejan de una forma majestuosa en las aguas y que lleva a contemplar unas atractivas puestas de sol vespertinas. Entre esta cadena de montañas todas las miradas de los montañeros se dirigen a dos especialmente: los picos Yordas y el Gilbo. Y estas eran los objetivos de nuestra excursión. Dos objetivos que el invierno los hacen especialmente delicados, pero a la vez mucho más espectaculares de ascender.

Fuimos a esta salida mas de veinte miembros del Grupo, y el alojamiento estaba claro desde el principio que pensamos ir a Riaño, en el Refugio de Paco y Natacha, un lugar acogedor y entrañable que a la vez es su propia casa y donde no falta un rato de charla y anécdotas en este agradable rincón montañero, que cuenta con literas individuales.

 

.:: SUBIDA AL PICO YORDAS ::.

FICHA TECNICA DE LA ASCENSION AL PICO YORDAS (1.967 m.)

FECHA

27 de Diciembre de 2005

SALIDA

Pueblo de Liegos (1.197 m.)

DESNIVEL

770 m.

HORARIO salida

llegada

10,00 h.

15,30 h

DIFICULTAD

Media

TIEMPO

Nublado

 

El sábado, 27 de diciembre, salimos a las 8.00 horas en coche hacia el pueblo de Liegos situado a unos 15 kms, lugar de inicio de la marcha al pico Yordas. La llegada al pueblo no pudo ser más desalentadora, ya que se puso a nevar y presagiaba un tiempo nefasto.

La primera parte del camino discurre por una pista forestal que se inicia al final del pueblo y que por el fuerte frío que hacía, estaba totalmente helada y ello nos hizo recorrerla con cierta atención.

La pista va por un precioso valle, donde predominan los hayedos y pastos. Tras recorrer unos 3,5 kilómetros, y después de pasar una construcción para el ganado, se debe tomar una nueva pista que sale a la izquierda y que cogemos tras atravesar el riachuelo que hemos llevado a nuestro lado buen rato del camino. Aquí entramos de lleno en la profundidad del hayedo y seguimos el camino que va ascendiendo en zig-zag. Un bosque que envuelto en la humedad y la neblina invitaba a la imaginación y hacia pensar que en cualquier momento de la marcha nos iba a aparecer un ser salido del mundo de la fantasía infantil o del libro/película, El Señor de los Anillos. También atravesamos un pequeño pero espectacular bosque de tejos.

La pista termina en un manantial y comienza una senda que gira a la izquierda y que pronto nos lleva al covachón, una especie de cueva al pie de la Peña Cabeza y que nos sirve para protegernos un rato del frío y la humedad y tomar algo de comer. Unos metros más arriba llegamos a una zona despejada pero que nos sirve de poco para ver algo, ya que la niebla es muy fuerte y encima la nieve acumulada en el camino nos impide progresar rápido.

Seguimos avanzando y por fin conseguimos llegar al collado de Bagulloso. En esta zona el grupo se divide y unos deciden dar la vuelta, mientras otros quieren alcanzar la cima. A partir de aquí el camino se hace difícil de intuir y hay que hacer uso de la brújula y la experiencia en alta montaña. Buscando el “camino” y después de andar durante una hora más, aproximadamente, se consigue llegar al pico Yordas (1.967 m.). Aunque la vista que desde aquí se puede contemplar es espectacular, la densa niebla impide apreciarla. Ya solo queda regresar por el mismo camino que hemos venido y tomarnos unas cervezas en uno de los bares que tiene el pueblo de Liegos.

El día termina en el bar del pueblo de Horcadas, donde Lola nos prepara una suculenta cena que nos entona el cuerpo tras la fría jornada que hemos tenido.

 
 
 

En “El Refugio” iniciamos la jornada con un buen desayuno para iniciar la ascensión del Yordas.

Una bonita foto de las montañas que rodean Riaño. Destaca el Yordas.
 
 
 
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.:: SUBIDA AL PICO GILBO ::.

FICHA TECNICA DE LA ASCENSION AL PICO GILBO (1.674m.)

FECHA

28 de Diciembre de 2005

SALIDA

Pueblo de Horcadas (1.147 m.)

DESNIVEL

527 m.

HORARIO salida

llegada

10,30 h.

13,30 h

DIFICULTAD

Media

TIEMPO

Soleado

 
 

El Gilbo desde Riaño resulta muy atractivo y llamativo. Su forma es la clásica montaña que todos imaginamos, una pirámide perfecta, un pequeño K-2 o un pequeño Cervino como algunos lo definen. Yo diría, salvando las distancias, el Cervino de Riaño. Comparaciones aparte, aunque no muy alto (1.674m) lo que si es, es estimulante para conquistarlo a un montañero que lo contemple desde Riaño.

El inicio de la ascensión es desde el pueblo de Horcadas, situado a unos 5 kms de Riaño. El camino se coge por detrás de la iglesia, es evidente ya que esta recientemente arreglado y unos postes marcan la senda. Se debe seguir este camino hasta una fuente que hay en un amplio prado para el ganado. Aquí la vista del Gilbo no tiene nada que ver con la que se apreciaba en Riaño, aquí más que un pico es una pared amplia y rocosa con una apreciable cresta en la cumbre.

Según miramos de frente podemos ver claramente como el camino se coloca bastante vertical y nos indica que debemos realizar una bonita trepada hasta la cumbre. Antes de iniciar la subida nos reagrupamos y echamos un vistazo buscando la mejor ruta. Se puede apreciar claramente que hay una especie de senda que es fácil encontrar por el verde que la rodea y que destaca especialmente en la espectacular roca granítica. Poco a poco vamos subiendo y la inclinación es cada vez más acusada, lo que provoca algunas dudas en algunos de los miembros menos experimentados ya que las manos se deben usar en algunos pasos, hecho que a la mayoría nos parece divertido y muy entretenido y es que en ningún momento se ve un riesgo real de peligro.

Por fin llegamos a la cresta y nos permite ver el otro lado de la montaña y a la vez apreciar el paisaje en su justa medida. Todos nos quedamos boquiabiertos, es espectacular todo lo que nos rodea, merece la pena subir para ver esta belleza. Hacia cualquier lado que miramos alucinamos, la cadena montañosa esta especialmente atractiva, el sol y el cielo azul junto a las nieves que cubren muchos sitios, así como las colas del embalse que tenemos a nuestros pies, todo ello forma un conjunto que no tiene nada que envidiar a cualquier rincón pirenaico.

Fotos y más fotos, para plasmar este rincón. Hasta que al final nos vamos decidiendo ir hacia la cumbre definitiva del Gilbo. Según vamos avanzando por la cresta vamos viendo que el paso es cada vez más delicado, sobre todo cuando en la cara norte hay nieve y cada vez se iba poniendo más delicada la cresta. Al final uno tras otro vamos parando, para al final quedarnos la mayoría a unos metros de la meta, que si fue alcanzada por cinco miembros del Grupo.

 
 

Estamos preparados en la plaza del pueblo de Horcadas para iniciar la subida al Gilbo.

 
 
 

Fotos de las colas del embalse de Riaño y alrededores tomadas desde la cresta del Gilbo.

 
 
Zapata, su hijo y Juanito superando la cresta del Gilbo.
El intrépido montañero JuanBe por la cresta del Gilbo
 
 
Rosa, Alicia, Abilio y Paco en la cresta del Gilbo. Al fondo se pueden apreciar otros miembros del Grupo de Montaña Pegaso.
Rosa y Paco con Guillermo en la cresta del Gilbo.
 
 
Otros miembros del grupo en la cresta.
En pleno descenso
 
 
Satisfechos de nuestra ascensión volvemos hacia el pueblo de Horcadas, donde nos espera un buen cocido montañes

Al levantarnos para la marcha hacia casa nos encontramos con una bonita nevada.

 
 

Riaño es el centro geográfico y núcleo de la Comarca "Montaña de Riaño", ubicado en plena Cordillera Cantábrica; el cierre de la presa del embalse de Riaño , sobre el río Esla, a partir de 1987, significó la inundación de la práctica totalidad del valle y la desaparición de seis pueblos.
El entorno montañoso formado por la Sierra de Riaño al norte, y las cumbres de pico Yordas (1.963 m.), Peñas Pintas (1.988 m.), Pico Gilbo y Cueto Cabrón abarca una extensión de gran valor paisajístico que forma parte del Parque Regional Picos de Europa y de la Reserva Nacional de Caza de Riaño. El municipio de Riaño comprende tres pueblos: Riaño, Carande y Horcadas.

La reconstrucción del pueblo de Riaño en el paraje de Valcayo, cerca de su antiguo emplazamiento, ha recuperado para la villa el centro comarcal que siempre fue y el punto de partida para acceder a los Picos de Europa y al resto de los hermosos valles de la Montaña Oriental Leonesa.

 
 
 

Una preciosa fotografía tomada desde Riaño con el Gilbo –“El Cervino de Riaño”. Una tentación para los montañeros.